Preparado para IPv6: Una guía para agencias de gobierno
Considera las posibilidades que las nuevas aplicaciones presentan para el sector público. Los dispositivos móviles pueden ayudar al personal de emergencia a clasificar de forma automática y dar seguimiento al estado de un gran número de víctimas de un desastre. Los sensores inalámbricos pueden ayudar a las agencias de transporte a monitorear las condiciones de puentes, carreteras y alguna otra infraestructura crítica. Con la ayuda de tecnologías máquina-a-máquina, los médicos podrían monitorear remotamente la condición de ciudadanos de edad avanzada, permitiéndoles que permanezcan de forma segura por mas tiempo en sus hogares.
¿Suena como ciencia ficción? De ninguna manera. Estos avances ya están sucediendo hoy en día. Solamente hay que observar como la adopción de medidores inteligentes ha reinventado completamente la forma en que trabajan las autoridades encargadas de los estacionamientos públicos.
La tecnología está jugando un rol cada vez mas importante en las operaciones del gobierno. Con la explosión de las comunicaciones máquina-a-máquina y las aplicaciones móviles, los empleados del sector público están cambiando sus roles a la vez que adoptan nuevas tareas. Y ahora la tecnología ha traído otro reto: las direcciones de protocolo de Internet (IP) usadas para soportar el rápido crecimiento del segmento móvil se nos han agotado y se debe implementar un nuevo sistema IP.
La necesidad de IPv6
Las direcciones IP son los identificadores numéricos que se asignan a cada dispositivo conectado a Internet. Cuando IP versión 4 (IPv4), la tecnología actual de protocolo de Internet, fue presentada en 1981, nadie imaginó el gran número de direcciones que serían consumidas por los dispositivos que habrían de ser creados. La necesidad de direcciones IP continuará creciendo mientras mas crezca la cantidad de dispositivos conectados y prolifere el ambiente móvil de comunicación.
A medida que nuestra fuerza de trabajo se vuelve cada vez mas fuerte debido al mercadeo personalizado, comunicaciones unificadas, tecnología máquina-a-máquina, y herramientas y aplicaciones de administración, los nuevos dispositivos requerirán sus propías y únicas direcciones de Internet.
El alcance de este crecimiento es enorme, e IPv4, con cerca de solo 4 mil millones de direcciones, no puede soportar esta demanda. En febrero de 2011 la Autoridad de Asignación de Números de Internet (IANA, Internet Assigned Numbers Authority) anunció que había distribuído los últimos 5 bloques de espacio de direcciones IPv4 –cada uno con cerca de 16.7 millones de direcciones- a empresas, universidades y gobiernos alrededor del mundo. Se espera que las direcciones IPv4 distribuidas se agoten a fines del año 2011.
Para solucionar este problema se ha creado una nueva tecnología IP: IPv6. IPv6 tiene un nuevo encabezado de paquete con un número de direcciones virtualmente inagotable. Con un espacio de dirección significativamente mas grande, y opciones estandar de encabezado de paquete, IPv6 posibilita nuevas capacidades basadas en red que previamente habían sido difíciles o imposibles con IPv4, incluyendo aplicaciones basadas en peer-to-peer y cómputo en la nube.
Aunque existen soluciones de corto-plazo, tales como Traducción de Dirección de Red (NAT, Network Address Translation), para soportar interoperabilidad entre IPv4 e IPv6, ambas versiones no pueden ser fusionadas, y por lo mismo deben funcionar de forma paralela.
Al principio debe existir un período migratorio donde IPv4 e IPv6 coexistan por algún tiempo ya que todas las direcciones IPv4 no se volverán obsoletas al final de año, y las agencias de gobierno deben atender a aquellos que aún utilizan direcciones versión 4. Existen formas para que los dos tipos de redes coexistan, pero eventualmente aquellas agencias que retarden la transición comenzarán a rezagarse, impidiendo a algunas personas accesar sus sitios web.
Los gobiernos estatales deben atender el llamado para adoptar nueva tecnología; el comienzo lo marcan la planeación y la educación.
La planeación para evolucionar a IPv6 es exhaustiva y consume mucho tiempo; se recomienda abordarla con los objetivos definidos y comenzar cuanto antes.
Entendiendo los conceptos básicos
Es necesario un plan de migración al nuevo protocolo, que consolide los dos puntos de vista extremos que existen con respecto a este tema –los alarmistas y aquellos que ignoran el cambio- y ninguno ayuda a lograr una transición suave.
¿Cómo deben responder las agencias y organizaciones? Los primeros pasos que debe tomar una agencia son tomarse tiempo para entender y aprender sobre el reto que se presenta, realizar una evaluación exhaustiva de la compatibilidad con IPv6, seleccionar un enfoque y comenzar a diseñar un plan de migración. Las organizaciones pueden capitalizar sobre los recursos disponibles, tales como servicios de consultoría, para comenzar a construir sus planes de trabajo.
Existen diversos tipos de enfoque que ofrecen solución a distintas necesidades. Las agencias deben evaluar los dispositivos que utilizan actualmente y determinar si están listos para IPv6. Virtualmente cada dispositivo –impresora, fax, teléfonos, elevadores, intercomunicadores- tienen una dirección IP. Algunos de estos ya pueden ser compatibles para correr ambos protocolos, algunos pueden necesitar actualizaciones de software y otros podrían tener que ser reemplazados. IPv6 también impacta a enrutadores, servidores de Internet, balanceadores de carga, redes de área amplia, sistemas de nombre de dominio, protocolo DHCP, protocolo LDAP y herramientas y aplicaciones de administración. La compatibilidad de IPv6 debe ser considerada en las decisiones de compra.
Esto puede ser una inversión fuerte –una que potencialmente puede tomar desprevenida a una organización sin un plan sistémico diseñado.
Las organizaciones que requieren bloques contiguos de direcciones o que planean grandes asignaciones de direcciones para soportar servicios futuros necesitarán hacer la transición a IPv6 muchos antes que los demás. Al dar los pasos en la dirección correcta, es posible lograr una disminución considerable en los costos de migración totales.
La planeación cuidadosa también asegura acceso a los recursos correctos. Se anticipa que de forma muy similar al Y2K, se presentará una escasez de personal capaz de asistir en el despliegue de IPv6, y las organizaciones que provean recursos de ingeniería en los tiempos de transición van a cobrar tarifas altas por trabajo que se pudo haber realizado en la misma empresa si se hubiese hecho una planeación apropiada.
La pila dual se encuentra entre los varios mecanismos de transición disponibles. Es una pila de red que soporta simultáneamente IPv4 e IPv6. Esta tecnología le permite a una organización ser “bilingüe”, permitiendo que los dos protocolos coexistan en los mismos dispositivos y redes.
Al abrir una avenida para comunicarse por ambas vías, las organizaciones pueden desplegar selectivamente nuevas aplicaciones que usen las redes sensoras sin tener que reescribir todos los sistemas existentes.
No existe límite sobre que tanto una organización puede permanecer en ambos protocolos, y el tiempo variará con respecto a la relación costo-administración.
Mientras que algunas organizaciones pueden encontrar favorable permanecer en una fase “bilingüe” IPv4 e IPv6 por un período extenso de tiempo, otros podrían migrar a un ambiente de solo IPv6 en un período menor.
Motivadores de adopción completa
Al hacer el cambio los sitios web de alta carga de tráfico, los usuarios comenzarán a operar en IPv6. La transición ha comenzado ya, y las organizaciones que no han tomado aún medidas proactivas corren el riesgo de ser dejadas de lado. Este movimiento ya está sucediendo en el ámbito global –muchas empresas europeas y asiáticas ya han comenzado su propia transición.
Variados factores conducirán la adopción completa de IPv6, sobre todo para reducir el costo de mantener ambos direccionamientos y redes. Otra fuerza conductora será la siguiente “aplicación de moda”, tal como la necesidad de adoptar voz sobre protocolo de Internet en redes de evolución a largo plazo. Adicionalmente sin conectividad extremo-a-extremo, las organizaciones no pueden tener ventaja del escalamiento de IPv6 para soportar redes “peer-to-peer”, movilidad ampliada y redes cableadas. IPv6 también ha simplificado el enrutamiento y reenvío de paquetes, sin dejar de proveer la flexibilidad necesaria para la diferenciación en el extremo de la red.
Autor: Tom Siracusa.
Artículo publicado en : http://www.govtech.com/pcio/articles/IPv6-Readiness-Primer-Government-Agencies.html